lunes, 1 de septiembre de 2008

Realidad magica


La realidad no es una ilusión óptica cualquiera, es la que hay. Cuanto antes se admita que la magia es la salvación más digna para nuestras almas deshumanizantes, antes entenderemos que los sueños, como dijo el poeta, sueños son. Hoy recuerdo la frase de Antonio Machado “Si es bueno vivir, todavía es mejor soñar, y lo mejor de todo, despertar.”

Hoy, el madrugador reloj de una ciudad bulliciosa, amotinada de regresos, palpitando en venas de metro, sacudida por el silencio de un lunes cansado, me ha obsequiado con un despertar que ha sido como una bofetada sin justificación, que duele pero te niegas el preguntar por qué. Noto el final de los solsticios tiernos de tardes largas al airito de un ventilador salvador, noches sudando pasiones, cerveza, pincho y bravas, besos que refrescan hasta los recuerdos y nostalgias dulces de fantasías de mar. Presiento comienzos de oscuridad melancólica, lluvia de mediodía y vuelta al desdén de la sangre en la nevera. Sospecho que el mundo tardará media vuelta al sol para sentirnos aves del paraíso con colores de cortejo. La esperanza ma sonriente es saber que en la oscuridad, la luz es más poderosa. Solo pasará que al verano le quedan días, y al invierno todo un otoño.

Nos llega en breve, y así justifico este amanecer, la oscuridad de una noche temprana y el frio afilado del viento norte. Vuelta a mitificar el café caliente, la manta en el sofá y la rutinaria rutina de buscar soles brillantes que nos saquen del tedio. Regresará el gris plata cristalino de un cielo batido que dota de belleza a una calle mojada de hojas moribundas. Vuelta a ordenar nuestras mañanas, nuestras tardes, nuestras noches. Vuelta a otoños de noviembre y vísperas de navidad. Vuelta a la disfrutar de la tranquilad de la tiniebla.

Pero nos quedan días para reflexionar, propina veraniega de San Miguel y la vuelta al verdadero principio del año que siempre será octubre. Y seguiremos ilusionados con la llegada de lo que no tenemos, para disfrutar del delicioso arte de saber perder, de vivir para ganar, de luchar por imposibles, dando vueltas al sol, observando mas estrellas. Y nos llenaremos de momentos, de detalles, de melancolías,… porque vivir se convierte en algo más que respirar desde ese momento que descubrimos que la realidad es la más sincera de las ilusiones, porque es la que hay, y ya admitida la verdad, tan solo nos queda sonreír, aumentar, ilusionarnos, sumar y eso solo es cuestión de creer y luchar por llenarlo todo de Magia.

Imagen: ‘Robada’ con respecto de http://caoticainma.wordpress.com/ (blog recomendado p.c.)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Que bien escribes jodio!
Y que bien sientes!
No es una ilusión la mágia de la realidad. Nunca. Alegraté que llega el otoño, cálido y magestuoso.
Lleno de sumas y días. Lleno de conciertos y algarabías. Lleno de amor y sosiego. Lleno de una realidad al alcance de la palma de tus manos.
No pienses en el frío... creo que este invierno vendrá con una estufa debajo del brazo.

Un abrazo.

Nares Montero

Anónimo dijo...

Mezcla de felicidad y tristeza, lastima que según lo describes haya tenido un final.

Anónimo dijo...

Pero esto está basado en echos reales???? si es así, yo voluntaria a ser la manta, tu no puedes pasar frio canario no lo permito.