miércoles, 11 de junio de 2008

Sra. y Sr. Doofmayer



La noche que se enamoró de su marido, la encantadora y tierna Sra. Doofmayer, no advirtió de forma alguna el desencuentro entre dos botones y dos ojales de su camisa de gasa estampada que mostraba, sin remedio y en aquella importante cita, el escote colegiado y saludable que condensaba en su sostén de encaje beige . Descuido y nervios lo justifica ella, arma magistral de seducción lo reconoce el inmenso Sr. Doofmayer. Esa pequeña anécdota de aquel día, sin duda emocionante, es una de esas historietas que se recuerdan de vez en vez, como cuaderno de sus costumbres, en los últimos 58 años de matrimonio.
58 años. Ya ves tú.
Lo verdaderamente hermoso y encantador de los adorables Sr, y Sra. Doofmayer es que aún hoy Ella se sonroja y Él la mira lleno de deseo.