Piensa bien antes de abrir la boca.
Medita con calma, con inteligencia, razonando la expresión, midiendo la entonación.
Hazlo bien y siendo consciente de lo que quieres decir, de lo que quieres vivir, de con quién quieres compartir tus momentos.
Y ten cuidado:
TODOS TUS JUICIOS HABLAN DE TI.
miércoles, 2 de julio de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario